Joana, CEO de Bodality, es una mujer emprendedora, multidisciplinar y muy creativa, que ya va por su segunda empresa relacionada con el sector nupcial. Nacida en Bilbao, desde bien pequeña comenzó a darse cuenta de la pasión que tenía por todo aquello que tenía que ver con la organización eventos. “Desde muy temprana edad buscaba algo que me permitiese crear y estar en contacto con las personas”. Joana era la típica amiga que se encargaba de organizar fiestas y cumpleaños y era la anfitriona perfecta. Tanto que a día de hoy ha creado la Guía para ser Wedding Planner, un curso wedding planner que va mucho más allá, ya que te muestra lo que hay detrás de esta profesión, y los verdaderos retos a los que se enfrenta cada día esta figura.
Como en aquella época no había tanta oferta de estudios relacionados con el protocolo y la organización de eventos, se decidió por estudiar Turismo en Valencia. “Pensé que era una vía para poder dedicarme a lo que verdaderamente me apasionaba”. Uno de sus primeros trabajos relacionados con lo que había estudiado, fue el de recepcionista de un hotel en Andorra. Era un trabajo en el que disfrutaba y le encantaba por la cercanía con los clientes.
Sin embargo, por su cabeza siempre rondaba la idea de dedicarse a la organización de eventos. Tres años después, ese trabajo le permitió acceder a un puesto de RRPP en un hotel. “En ese momento descubrí mi mundo, mi lugar por así decirlo. Tuve clarísimo que eso era lo mío y lo que realmente me gustaba”. Joana comenzó a realizar labores comerciales. Aprendió mucho sobre protocolo y recibía formaciones constantes. Lo cual le permitió adquirir mucho conocimiento hasta alcanzar el bagaje necesario que debe tener un profesional de este sector.
Cuando descubres tu gran pasión
En muchos de los hoteles donde trabajaba Joana se organizaban bodas. “Fue en ese momento cuando de repente, descubrí el mundo de las bodas. (…) Las piezas del puzzle terminaron de encajar y tuve muy claro que eso era a lo que quería dedicarme. El hecho de organizar una boda, conectar con los novios, tratar con los proveedores y crear ese momento especial fue lo que más me llenó y lo que me hizo dar el paso para emprender”. La CEO de Bodality, a pesar de que su trabajo le llenaba y estaba satisfecha con lo que hacía, no pudo evitar escuchar esa voz interior que le decía que debía emprender en aquello que realmente le apasionaba.
“Las piezas del puzzle terminaron de encajar y tuve muy claro que eso era a lo que quería dedicarme”
Fue desde entonces cuando Joana, aunque seguía trabajando entre Andorra y Barcelona, fue gestando el que sería su modelo de negocio. En ese momento, la empresa Be my Valentine. Una empresa que nunca llegó a formalizarse, pero que le ayudó en el proceso de crear su propia empresa y pensar en qué podría ofrecer para diferenciarse de la competencia.
Al cabo de un tiempo, Joana vio que Andorra era un país demasiado pequeño para emprender. Y en Barcelona, sin embargo, había demasiada competencia. Así que decidió arriesgar emprendiendo en Galicia. Ciudad de la que procedía su pareja. Cuando llegó a Galicia consiguió un puesto en MICE, Meetings, Incentive, Congress and Events. Ese trabajo le permitió seguir creciendo en toda la parte de creación de eventos, en este caso corporativos, mientras seguía gestando y desarrollando su propia empresa.
Tras un año y medio en Galicia, Joana decidió dejar su puesto de MICE y lanzarse a la piscina junto con su socia. “Al trabajar en una asesoría hicimos el tándem perfecto, porque ella se encarga de la parte de números, y yo me enfoco en la parte más creativa.
En Entre decorados , Joana no solo ofrece el servicio de Wedding Planner, también el de diseño y decoración todo tipo de bodas y eventos, ya que es su otra pasión oculta.
Cómo se gesta Bodality
Desde sus inicios, Joana siempre ha sido una persona muy proactiva y a la que le gusta aprender día a día para desarrollarse tanto personal como profesionalmente. “Sabía que quería desarrollar un poco esa parte y comencé a formarme para ello. Hice un postgrado de marketing digital para desenvolverme mejor en este mundo de emprendimiento. Me formé en el sector nupcial realizando un curso Wedding Planner y otro de Wedding Design. Y completé mi formación con otros cursos de Wedding Planner online para conocer WordPress y ver cómo funcionaba todo el proceso de creación de una web”.
Afortunadamente y gracias al buen trabajo de Joana y su equipo, Entre Decorados ha funcionado muy bien prácticamente desde el inicio de su creación. Enseguida comenzaron a tener clientes, organizar bodas y decorar todo tipo de espacios en eventos y celebraciones. No obstante, la mente de Joana seguía maquinando y quería más. “Tras haber realizado diversos cursos para seguir especializándome en el sector nupcial, me di cuenta de que salíamos de allí con un título que ponía Especialista Wedding Planner, pero la mayoría de mis compañeros no tenían ni la experiencia, ni el bagaje, ni los recursos necesarios para poder comenzar a organizar bodas.”
“Detecté la necesidad de mostrar lo que verdaderamente hay detrás de la profesión de Wedding Planner, de lo que implica y de los recursos que se necesitan para organizar bodas con tus propios medios”.
Formación integral
Aquí es donde nace Bodality, una vía para mostrar no solo en qué consiste el trabajo de un Wedding Planner de manera superficial, si no de todo lo que hay detrás. “Detecté la necesidad de formar a las personas que querían dedicarse a esta profesión para que fueran conscientes de lo que verdaderamente hay detrás, de lo que realmente implica y de los recursos que van a necesitar para poder organizar una boda por sus propios medios”.
La función del Wedding Planner no solo consiste en conocer una pareja, conseguir unos proveedores y organizar la boda. También hay toda una parte administrativa detrás a nivel empresarial, organizativa y de precisión que es necesario conocer y manejar muy bien. Un Wedding Planner puede llevar unas diez parejas al año. Si esas diez parejas tienen una media de diez proveedores cada una, son muchas personas, mucho trabajo y muchas horas de dedicación. Y esa es una de las cosas que Joana muestra en su Guía para ser Wedding Planner.
Guía para ser Wedding Planner
Joana, con una trayectoria de más de 6 años de experiencia en el sector de la organización de eventos, ha logrado un conocimiento y un bagaje que le permite enseñar a otros la realidad de un Wedding Planner. Y todo lo que debe aprender para poder dedicarse profesionalmente. Por este motivo, se ha atrevido a crear un curso Wedding Planner en el que su principal propósito es “formar a Wedding Planners de valor que crean en lo que hacen, que sepan lo que cuesta trabajar y sobre todo que sean capaces de crear su propia empresa con unas bases sólidas”.
Un Wedding Planner no solo tiene que ser experta en la parte organizativa. También tiene que dominar las cuestiones administrativas. Como son los presupuestos, los pagos, las facturas. O, por ejemplo, la parte de comercial y de marketing, indispensables en la actualidad para poder vender tus productos y servicios, así como para poder captar clientes y hacer crecer tu propio negocio.
“Quiero aportar mi experiencia en mi trayectoria profesional para que las personas que se quieran dedicar al sector, puedan hacerlo de una manera más preparada y sabiendo de antemano a lo que se van a enfrentar.”
En el curso Wedding Planner encontramos muchas anécdotas y experiencias que ha vivido Joana, para que los futuros profesionales del sector sean conscientes de las situaciones que pueden ocurrirles, que puedan solucionarlas rápidamente, o incluso anteponerse a ellas antes de que se produzcan. Es el caso por ejemplo, de bodas en las que, en pleno baile nupcial, se ha ido la luz. “Este tipo de situaciones son más habituales de lo que a priori pensamos, por lo que es muy importante que el Wedding Planner esté preparada para los imprevistos”. Como por ejemplo, comprar un generador de luz por si se va la electricidad, o alquilar una carpa aunque no se esperen lluvias, de manera que si ocurre, el problema pueda solucionarse en menos de 5 minutos.
Cualidades que debe tener un Wedding Planner
Joana destaca dos tipos de atributos indispensables para un Wedding Planner de éxito. Por una parte, las habilidades que uno tiene de forma natural o innata. Como son la seguridad y confianza en uno mismo y el don de gentes. Y por otra, habilidades que se pueden conseguir trabajándolos. “Un Wedding Planner debe, antes de nada, encontrar su propia esencia, creer en el valor de su trabajo y mostrar convicción en todas sus acciones (…) Un Wedding planner dubitativo en cuanto a las decisiones que ha de tomar trabajando, es muy difícil que sea bueno porque se va a encontrar en muchas situaciones de cambios inesperados, de incertidumbres y de dudas por parte de sus clientes”. Por este motivo, tiene que ser seguro de sí mismo, firme y elocuente en sus decisiones, para transmitir la confianza y tranquilidad que necesitan recibir sus clientes.
Por otro lado en cuanto a cualidades innatas en la persona, un Wedding Planner debe ser una persona amable, empática y con don de gentes. Saber cómo debe tratar a cada persona y, sobre todo, tener claro que le gusta la parte comercial, ya que va a tener que venderse tanto a sí misma como a sus proveedores”.
Cualidades adquiridas
Por otro lado, existen otras cualidades que si se aprenden y trabajan en un curso Wedding Planner van a permitir que el trabajo del Wedding Planner sea impecable y profesional.
1. La organización es la característica más fundamental para poder planificar los preparativos de una boda.
2. Saber priorizar. Con un sinfín de llamadas, papeleos y gestiones por delante en cada jornada de trabajo, es muy importante saber priorizar las tareas en orden de preferencia.
3. Productividad. El trabajo de un Wedding Planner es mucho más extenso de lo que a priori puede parecernos. Por ello es muy importante aprender a ser productivo, ser rápido en las gestiones y en definitiva ser más eficientes.
4. La psicología del sentimiento. “Si bien es cierto que no somos el psicólogo de la pareja, es verdad que podemos llegar a cambiar totalmente la perspectiva de una pareja y su modo de pensar”. El Wedding Planner es el experto que se encarga de tranquilizar, orientar y dar estabilidad a la pareja. El que se encarga de guiar a los novios para que tomen las decisiones acertadas. Y para ello, “es necesario adquirir unos conocimientos previos, que te permitan tener unas bases para conocer muy bien a la pareja. Sus debilidades y fortalezas. Y saber responder a sus necesidades específicas”.
El primer contacto con los clientes en el curso Wedding Planner
En el curso Wedding Planner aprenderás que una profesional nupcial no puede organizar bodas a cualquier pareja. “Es muy importante buscar tu nicho de mercado, saber a quién puedes aceptar y con quién te sientes identificado”. Por ello, son muy importantes los primeros encuentros, llamadas y reuniones previas, para ver si hay esa conexión entre Wedding Planner y pareja. “Para ello, hay que preparar con antelación unas preguntas específicas que nos ayudan a organizar la primera reunión. Y que nos permiten conocer en profundidad a la pareja. Saber si hay afinidad. Y saber si eres o no la persona adecuada para organizar su boda”.
De hecho, “existen distintos servicios dentro del mundo Wedding Panner para poder adaptarnos a las necesidades de cada pareja”. Como puede ser, por ejemplo, el servicio de acompañamiento en el día de la boda para aquellas parejas que ya han organizado los preparativos, pero tal y como afirma Joana, “quieren despreocuparse el día de la boda para poder disfrutar del día más importante de sus vidas”.
La figura del Wedding Planner
El Wedding Planner existe porque hay parejas que por su personalidad o situación personal, no pueden disfrutar del proceso de preparar su boda. Ya que ello les acaba suponiendo mucho estrés y ansiedad. Para las parejas con hijos, que trabajan muchas horas, etc. la figura del Wedding Planner les facilita mucho la vida.
En muchas ocasiones, las parejas buscan a este tipo de profesional cuando ya han comenzado con los preparativos y se dan cuenta de todo el trabajo y tiempo que conlleva. “En este punto se pone en valor la labor del Wedding Planner, esa figura que no solo organiza una boda, sino que además, es el encargado de acompañar a la pareja en el proceso. De manera que debe pautar y organizar las tareas para que la pareja pueda tomar sus propias decisiones y disfrutar del proceso de preparación de su boda, pero sin tener que encargarse de las partes más sacrificadas como pueden ser los temas económicos, la facturación o los presupuestos.”
El papel del Wedding Planner en España se está implementando en los últimos años. En EEUU y Latinoamérica, sin embargo, ha existido prácticamente desde siempre. Hasta el punto de ser un requisito indispensable. Esto ocurre por la cultura que tenemos en España, y porque los españoles, como sociedad, han evolucionado mucho en los últimos años. No es lo mismo una boda de hace treinta años que las de ahora. Igual que no es lo mismo el papel de la mujer en la actualidad, completamente integrada en el mundo laboral, que el de la mujer española de hace treinta años. En definitiva, las tendencias han cambiado mucho a lo largo de este tiempo y por este motivo, este sector está en pleno crecimiento, y se prevé que va a seguir al alza.